Yo me estoy inspirando para escribir este artículo basado en mi experiencia mudándome de país, pero yo creo que aplica para nueva casa, nuevo vecindario, etc…
Si bien es cierto, los niños menores de 5 años suelen sobrellevar las mudanzas mucho mas fáciles que los niños mayores, debido a su limitada capacidad para entender lo que conllevará ese cambio. Sin embargo, es importante que nosotros, como padres, no tomemos por sentada su adaptación y los ayudemos a manejar estas situaciones de la mejor manera.
Para comenzar, creo que anticiparse es lo mas importante. Especificar a donde iremos y como será este nuevo lugar es fundamental para que el cambio no les llegue por sorpresa y los asuste. Además, mantener una actitud positiva delante de tu pequeño es necesario, ya que a los niños les afectan las actitudes de los padres en momentos de cambio y transición. Por eso, si estás inseguro o apenado, mejor evita demostrarlo frente a tus hijos, por el contrario, transmite seguridad y tranquilidad.
Por otro lado, es importante comunicar suficiente información sobre el nuevo lugar, como se ve, que idioma se habla, como será la casa, la zona, etc. Responder a las preguntas que los peques tengan, por mas sencillas que parezcan, a ellos le hace mucho sentido preguntarlas y les genera preocupación, por ejemplo: dónde guardaran sus juguetes, con quien van a jugar, etc… Responde todo con claridad y se paciente con ellos.
Si te esta costando que tu hij@ entienda el concepto de mudanza y crees que no está comprendiéndolo con facilidad, te recomiendo simular con juguetes el traslado y la mudanza para que empiece a asimilar los cambios que se vienen como un “juego”. También puedes apoyarte de cuentos infantiles o películas donde toquen el tema.
Por último, y como consejo personal, desmonta la habitación de tu hijo al último y prioriza esa habitación para montar primero cuando te mudes a tu nuevo hogar. Así, ese momento de cambio sea mínimo y tu pequeño pueda gozar de comodidad por una mayor cantidad de tiempo. También te recomiendo mantener los muebles o decoración de tu hijo pequeño en tu nuevo hogar (si es posible) para que la familiaridad del lugar le genere calma.
No está de más evitar realizar otros cambios inmediatos después de la mudanza, como dejar los pañales, dejar el chupón o empezar a apagar la luz… Es importante que las rutinas se mantengan lo mas similares posibles y que el cambio sea mínimo.
Espero que el proceso de transición de tu pequeño se haga mas simple con estos tips. Te recomiendo mantener la calma y recordar que, para ellos, una mudanza significa mucho más que para nosotros los adultos. Estoy segura de que, con tu acompañamiento, tu peque podrá sobrellevar el cambio de la mejor manera. Soy AleValdezTips, nos vemos en el siguiente vlog.
